Por regla general, cuando un paciente acude a consulta médica, llega con varias inquietudes y expectativas, tales como el deseo de recibir sólo buenas noticias o conocer si sentirá algún dolor o no. El paciente también lleva grandes expectativas sobre cómo será su interacción con el doctor.
Comúnmente, los profesionales de la salud no le preguntan al paciente cuáles son estas expectativas, y en su lugar, asumen las respuestas. Es de vital importancia recapacitar sobre las razones por las cuales el paciente ha acudido a consulta y sobre qué espera, y no centrarse únicamente sobre qué está mal con el paciente y cómo lo solucionamos.
Si el paciente vive una experiencia muy diferente a lo que él/ella espera, es probable que estas expectativas no satisfechas lleven a un punto de decepción, lo cual puede ser un poderoso factor de predisposición que lo lleve a tomar cierto curso de acción. La percepción del paciente sobre el resultado obtenido puede discrepar mucho de la del propio médico, pero es la precepción del paciente la que importa en términos de insatisfacción.
Algunos pacientes tendrán expectativas irreales sobre los resultados y por ello deben aclararse por adelantado, en vez de corregir en retrospectiva con una frase como: “Era irreal lo que Ud. esperaba”. El profesional de la salud tiene más oportunidades de cumplir con las expectativas del paciente, y evitar la decepción, si se toma el tiempo para conocerlas y, por lo tanto, reconoce la importancia de preguntar sobre ellas.
La decepción del paciente se puede tornar en enojo, el cual puede llevar a buscar un culpable y posteriormente a una demanda. La realidad es que existe una fuerte relación entre la insatisfacción del paciente y el establecimiento de una demanda y un litigio.
Ya se por accidentes o simples descuidos, en cualquier momento se puede presentar una demanda. Es por eso que para evitarlas dentro de tus actividades diarias, a continuación te compartimos cuatro recomendaciones generales que te serán de utilidad.
Recomendaciones generales
- Documentación Médica adecuada.
- Correcta relación médico-paciente-familia.
- Formación especializada en Derechos Humanos, Bioética y Derecho Sanitario.
Recomendaciones institucionales
- Control de ingreso y egreso de pacientes.
- Adecuado funcionamiento de estadística y archivo.
- Entrega de cadáveres.
- Asesoramiento médico-legal.
- Creación de comités éticos en los hospitales.
Recomendaciones en servicios médicos
- Capacitación profesional.
- Integración de departamentos diagnósticos y terapéuticos.
- Guías de atención médica.
Recomendaciones a los profesionales médicos
- Consentimiento Informado.
- Buenas condiciones laborales.
- Trato cordial y respetuoso hacia los pacientes y colegas.
- Trato cordial y buena comunicación con el equipo de salud.
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